La pieza de orfebrería textil que el domingo desapareció del Santuario de Nuestra Señora de Consolación regresará a su ubicación apenas 48 horas después del robo. La Guardia Civil devolverá este miércoles a las 9,30 horas el traje del Niño Jesús que porta la Patrona de Utrera, una prenda elaborada en tisú blanco con bordados en oro que fue sustraída en la tarde del 23 de noviembre.
La Pontificia, Real e Ilustre Hermandad de Nuestra Señora de Consolación Coronada confirmó a primera hora de este martes la sustracción y activó de inmediato el protocolo de seguridad. La corporación presentó denuncia formal ese mismo día y mantuvo contacto permanente con la empresa de vigilancia contratada para custodiar el templo mariano.
La rapidez en la localización de la pieza se explica por la movilización inmediata de los devotos de la Virgen. La hermandad utilizó sus canales en redes sociales para difundir la sustracción, lo que generó una cadena de colaboración entre los utreranos que facilitó el trabajo de la Benemérita. Los responsables de la corporación han expresado públicamente su gratitud tanto al instituto armado como a los medios de comunicación que amplificaron el aviso.
El robo del traje del Niño Jesús se produjo durante la franja horaria de apertura al público del Santuario, ubicado en pleno centro histórico de Utrera. La prenda forma parte del ajuar de la imagen titular, cuya vestimenta incluye piezas de gran valor tanto artístico como devocional acumuladas a lo largo de décadas de ofrendas de los fieles.
La recuperación del traje bordado cierra un episodio que ha puesto en alerta a la Junta de Gobierno de la hermandad. Fuentes de la corporación revelaron que en los últimos meses se habían detectado varios intentos de sustracción de otros elementos del Santuario, aunque sin especificar qué objetos concretos fueron objetivo de estos intentos ni las circunstancias en que se produjeron.
Esta circunstancia apunta a una posible actuación premeditada o a la existencia de personas que frecuentan el templo con intenciones distintas a las devocionales. La hermandad no ha precisado si reforzará las medidas de seguridad tras estos incidentes, aunque la existencia de un sistema de vigilancia privada evidencia que ya existía preocupación previa por la custodia del patrimonio.
El templo que alberga a la Virgen de Consolación es uno de los espacios de mayor arraigo devocional en la localidad sevillana. La imagen, coronada canónicamente y declarada Patrona de Utrera, recibe visitas diarias de fieles que acuden tanto a título individual como en grupos organizados. Esta afluencia constante obliga a mantener abierto el Santuario en horarios amplios, lo que complica la labor de vigilancia del patrimonio que atesora.
El ajuar de la Virgen de Consolación incluye mantos, sayas, coronas y joyas donadas por devotos a lo largo de generaciones. El Niño Jesús que porta en sus brazos dispone igualmente de varias vestimentas para las distintas ocasiones litúrgicas, entre ellas la saya bordada en oro ahora recuperada, cuya elaboración requiere centenares de horas de trabajo artesanal.
La devolución oficial de la prenda este miércoles por parte de la Guardia Civil permitirá a la hermandad realizar una evaluación del estado de conservación de la pieza y determinar si el robo ha causado algún deterioro en los bordados o en la estructura del tejido. La corporación convocará previsiblemente a los medios de comunicación locales para documentar el momento de la recuperación definitiva del traje del Niño Jesús.